Seleccionar página

Lynn, Germinel y Rigoberto recibieron en Cali su nacionalidad colombiana, gracias a la facultad que el Ministerio del Interior entrega a los alcaldes para realizar estos procedimientos.

Lynn, nacional de Belice, ha vivido en Cali por más de 20 años; habla perfectamente el español; es casada con caleño y sus dos hijos son colombianos. “Estoy muy contenta. Me demoré muchos años para decidirme a hacer el proceso, pero finalmente lo comencé hace dos años y me aprobaron. La idea es quedarme aquí en Cali el resto de la vida”, expresa.

Para don Germinel Gutierréz, de nacionalidad cubana, su país y Colombia guardan gran similitud en cultura y algunas costumbres. “Hoy me siento supremamente agradecido con las autoridades de este país, por darme la oportunidad de reunirme aquí con mis dos hijas que viven en Cali y por poder, finalmente, sentirme como uno más de ustedes”, afirmó.

Por su parte, el venezolano Rigoberto Estaba llegó a Colombia en compañía de su esposa y sus dos hijas en 2017. “Con el favor de Dios me aprobaron los papeles. Este es un esfuerzo que hacemos en familia, buscando un mejor porvenir en el tema educativo y de salud para mis niñas”, afirmó, luego de destacar lo que más le gusta de Cali: “la alegría de las personas y su vocación espiritual”.

María del Pilar Cano, asesora jurídica de la Alcaldía del ‘Puro Corazón’, afirmó que estos nuevos ciudadanos por adopción han cumplido con todos los procedimientos y requisitos de la ley 43 de 1996 para recibir su nacionalización. “Ahora ellos deben continuar su procedimiento para adquirir la cédula colombiana que los acredite como nacionales”, precisó.

Según la funcionaria de la Administración Distrital, este último proceso no tomaría más de mes y medio, solicitudes que se tramitan en Migración Colombia y la Registraduría Nacional de la Nación.