Seleccionar página

Desde la madrugada de este lunes 12 de julio, las autoridades distritales llevaron a cabo un proceso de traslado y reubicación de un grupo de personas que quisieron invadir y ocupar el Jarillón sobre el río Cauca.

Jorge Iván Ospina al indicar que este ha sido un operativo desplegado desde la interinstitucionalidad, recordó que el Jarillón es una estructura que no se puede ocupar, porque es la protección del territorio caleño ante aumento de las aguas del río Cauca.

“El Jarillón no es más que la oportunidad de evitar que se inunde todo el oriente de la Amada Cali, por lo que es indispensable protegerlo de toda clase de invasión”, expresó.

El mandatario distrital recordó que después de una década de intervención, donde el plan Jarillón muestra un avance de recuperación del 90%, ya se asoman intentos de nuevas invasiones, por esto y evitando que el dique se urbanice, se invada y se construyan edificaciones se privilegia la vida, porque si este se llegara a fracturar y romper afectaría las plantas de producción de agua potable de rio Cauca y Puerto Mallarino que abastecen a más del 80% de la ciudad, generando de paso una crisis sanitaria de grandes proporciones que podría llegar a afectar a más de un millón de personas”.

Ospina reiteró con marcado énfasis: “no podemos permitir la invasión del Jarillón, de ahí que adelantamos este esfuerzo por la vida con el acompañamiento del Ministerio Público, sin embargo, sobre esta discusión, Cali no puede permitirse la toma de esta estructura para vivir como algunos han pretendido hacerlo, porque generaría peligro para el resto de la ciudad”.

“Nuestro esfuerzo es decidido para evitar el debilitamiento del dique por causa de invasiones, pues esta estructura cercana a los 20 kilómetros de largo, protege a la ciudad de los embates del segundo río más importante de Cali, especialmente en temporada de lluvias o crecientes súbitas”, concluyó