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¡Hola, este long play suena como destemplado¡ expresó con asombro Lorena Henao Loayza, la primera mujer en dirigir el Encuentro de Melómanos y Coleccionistas en una Feria de Cali, mientras preparaba su material para una audición en el programa ‘Salsa al parque’, de la Alcaldía de Cali que, se llevaría a cabo en el tradicional parque de Jovita Feijoo.

Algo le pasaría al tornamesa. Respondió su esposo, Gabriel Olaya, quien al acercarse al equipo notó algo salido de lo normal. Al fin y al cabo, él también es uno de los cerca de 1.300 melómanos y coleccionistas de joyas musicales que hay en la Capital Mundial de la Salsa y quien, precisamente introdujo a Lorena en el mundo de las ‘panelas’ como llaman a los acetatos y vinilos de colección.

Mira, Lorena. Ahí dice que este disco es de 45 revoluciones por minuto (RPM) pero está en un formato grande, de 33 RPM.

Y ¡oh sorpresa¡ al colocarlo en 45 sonó perfecto. Era nada más y nada menos que el tema ‘Huracán’ de Cal Tjader, prensado en el sello Crystal Clear Records. Una verdadera joya de colección que le hizo llegar este año, desde Nueva York, el maestro Ángel Luis Justiniano, director de la orquesta The New Swing Sextet.

Lorena, estupefacta, abrió una boca tan grande como el túnel mundialista. ¡¿Quéé´?¡

Esa misma expresión la repitió en el 2020 cuando, vía telefónica, el gerente de la Corporación de Ferias y Eventos de Cali (Corfecali), Alex Zuluaga, le propuso que fuera la directora del Encuentro de Melómanos y Coleccionistas en una Feria de Cali, evento que nació en 1991 y se consolidó en 29 años como el encuentro musical más importante de todo el planeta salsa. Fue tal su sorpresa, que se quedó muda.

Lore… ¿estás ahí? preguntó Alex

Sí. Sí, aquí estoy. Pero… ¿Por qué yo?

Y en tres minutos, de manera contundente, le recordó su trayectoria musical de más de 20 años de historia lidiando con acetatos de todas las revoluciones, discos compactos, tornamesas, parlantes, agujas de diamante, pañitos y delicadas brochas, organizando conciertos, mientras jóvenes y adultos calibraban su gusto musical y el conocimiento de los mismos al preguntarle por la autoría de un tema, quién tocaba los timbales, el piano o la flauta, en qué año y dónde se grabó y miles de curiosidades más que solo saben aquellos que afinan oído para percibir, en el fondo, una conga de Ray Barreto o un acorde al piano de Larry Harlow.

Como si se tratara del compromiso matrimonial que le hiciera Gabriel al son del tema ‘Amor eterno’, de German Olivera, volvió a abrir la boca para decir: ¡Acepto¡

Y fue así como esta caleña, nacida y criada en el barrio San Luis, la misma que es común ver en las audiciones de los barrios Obrero, Alameda, las canchas Panamericanas, las salsotecas y casas se melómanos, llegó a dirigir el más grande evento musical salsero, en medio de la pandemia.

Es tal la calidad, el conocimiento, la pasión y el estudio juicioso que se hace en Cali de la ancestralidad musical, día a día que, en la actualidad existen 24 asociaciones agremiadas en Unimel, donde cada una está conformada por cerca de 20 sabedores y cultores de música; más, cerca de 800 salseros, independientes, que llegan a las audiciones con sus reliquias bajo el brazo, en las casi 220 audiciones que se realizan durante el año.

Quizá el reto más grande al que se enfrenta Lorena en 2020 sea la pandemia, pues musicalmente no le queda grande nada. Su casa es un templo de sonidos, donde existe un altar en el que se custodia desde un CD o un acetato hasta una aguja, los cuales estuvieron guardados en cajones de madera durante mucho tiempo, para evitar que sus dos hijos pequeños los fueran a utilizar como juguetes. Hoy, la niña con 24 años y el niño, con 18, son herederos de un legado llegado del África y las Antillas.

“Asumo con la frente en alto. Este año del distanciamiento, el tapaboca, el gel y el alcohol nos obliga a la virtualidad; pero la vamos a aprovechar para mostrarle a todo el mundo que en Cali se vive la salsa, que llevamos la música en la sangre y que tenemos un consolidado movimiento de melómanos, único en su género”, dice con orgullo la directora del Encuentro de Melómanos y Coleccionistas.

Nuestra ciudad -continuó- traspasará fronteras gracias a las tomas aéreas que hará una flotilla de drones enfocando nuestros cerros tutelares de Cristo Rey y las Tres Cruces, viajando sobre la ciudad para destacar lugares icónicos, sitios emblemáticos, bailarines en las plazoletas, ambiente de fiesta en el barrio Obrero y el fondo musical de las orquestas caleñas.

“Mi deseo es que terminemos este año 2020 con alegría a pesar de la pandemia, hacerle un homenaje musical a los que se fueron, que sea un regalo de esperanza y positivismo de Cali para el mundo, una invitación de la Administración del médico Jorge Iván Ospina, para que el próximo año lleguen a la capital mundial de la salsa turistas de todos los continentes y que comprueben, en carne propia que, aquí somos ‘Guardianes de vida y música”, concluyó Lorena Henao Loayza, la primera directora que tiene el Encuentro de Melómanos y Coleccionistas de la Feria de Cali.