Juanita Chaparro y Salomé Pinto corren de aquí para allá por todo el escenario de las Piscinas Panamericanas, donde se realizan las competencias de nado sincronizado de los Juegos Panamericanos Junior 2021.
Recogen botellas plásticas desocupadas que los asistentes, deportistas y público, desechan. Y el trote no es en vano, dependiendo de la cantidad de envases que acopien obtienen un premio: “10 botellas dan para un termo, 20 para una cachucha y 30 para una camiseta de los Juegos”, comenta agitada Salomé, quien desocupa su canasta en el piso para contar muy bien, una a una, las que lleva recogidas. Está feliz pues completó más de las 30 y ya se ve vistiendo su nueva camiseta.
Como si fuera poco, Salomé también hace parte de la Selección Valle Juvenil de Nado Sincronizado y las energías le alcanzan para entrenar muy temprano en la mañana, “voluntariar” en los Juegos y hacer lo necesario para coleccionar premios con su reciclaje. Sabe que es un incentivo para tomar conciencia medioambiental: “así estamos ayudando a que el sitio se vea mejor, luzca mejor y de paso aportamos al proceso de reciclaje”, comenta.
Juanita está tranquila, ella ya recicló lo suficiente para reclamar su camiseta, por eso suelta su canasta y se va corriendo para adelantar otras labores mientras Salomé hace su conteo. Ella también, hasta hace poco, fue Selección Valle de Nado Sincronizado y se retiró para tomar un descanso, pero es un deporte que la continúa apasionando.
Juanita y Salomé saben que, con su aporte como voluntarias, también están haciendo historia en los Primeros Juegos Panamericanos Junior que han reunido a los mejores deportistas juveniles del continente americano, en Cali.