El jueves (30.09.2021) se llevó a cabo el Consejo de Seguridad Territorial Cuenca del río Cali, que lideró el alcalde Jorge Iván Ospina. Durante la segunda de varias mesas de trabajo que ya están programadas, la Alcaldía dio continuidad al diálogo con líderes y la comunidad en general, para recoger preguntas, preocupaciones y circunstancias especiales en materia de seguridad.
La meta es la creación de un plan estratégico en el que participen los entes correspondientes, para dar soluciones prontas a las problemáticas de mayor impacto en la zona rural de la ciudad.
El encuentro tuvo lugar en el polideportivo del corregimiento Pichindé, hasta donde llegaron miembros de las JAL y las JAC de La Leonera, Los Andes y Felidia. Allí, el mandatario caleño anunció que se llevará a cabo un consejo de gobierno para discutir a fondo otros temas como movilidad, empleabilidad y protección de los recursos hídricos.
En esta ocasión, junto al secretario de Seguridad y Justicia Distrital, Carlos Soler Parra, estuvieron titulares y representantes de organismos como Desarrollo Económico, Participación Ciudadana, Educación, Movilidad, Infraestructura, Cultura, Turismo, Paz, Metro Cali y la Uaespm, considerando que algunas de las solicitudes requieren acciones articuladas. También acudió el Ministerio Público, la Personería de Cali, la Policía Metropolitana, el Batallón de Alta Montaña y la Fuerza Aérea.
Aunque la comunidad reconoció el trabajo adelantado por la fuerza pública, manifestaron preocupación por el incremento de fenómenos como la minería y las construcciones ilegales, los asentamientos subnormales, la delincuencia común y organizada, el mal uso del espacio público, el consumo de estupefacientes y, en general, la falta de gobernabilidad en sus localidades.
Señalaron que es necesario reforzar el pie de fuerza y pidieron controles regulares con más puestos de Policía, apoyados por los carabineros, así como el mejoramiento del sistema de vigilancia con la instalación de redes tecnológicas.
Afirman que acciones como estas tendrían efecto en las características de cada población, para estimular el turismo y brindar a sus habitantes mejores condiciones económicas.
Luego de escuchar las intervenciones de la ciudadanía, el alcalde Jorge Iván Ospina expresó su intención de atender las peticiones y aseveró que su gabinete dará celeridad para llegar con soluciones concretas a cada territorio. El burgomaestre se mostró especialmente preocupado por las amenazas que han recibido algunas corregidoras, al parecer por su gestión, y se comprometió a dar trámite a las denuncias ante la Fiscalía General de la Nación.
Insistió en la importancia que tiene la participación de la comunidad en procesos para la protección los recursos naturales. Asimismo, hizo un llamado a los habitantes de estas localidades, para que actúen como veedores y eviten que el Parque Nacional Natural Farallones se utilice como un corredor para el tráfico de drogas ilícitas en la región.
En ese sentido, la Defensoría del Pueblo resaltó los esfuerzos de la Alcaldía por la preservación de estas zonas protegidas, pero señaló que hay alerta por el aumento de actores ilegales en la parte alta de la cuenca. Por eso, consideró que se deben mantener estos espacios de trabajo y acompañar a la comunidad en la zona.
Desde la Administración Distrital se advirtió que, bajo ninguna circunstancia, se permitirán ocupaciones ilegales, anunciando que avanzan acciones penales para proceder en los casos identificados hasta ahora. El alcalde Jorge Iván Ospina consideró urgente establecer un plan de intervención en esta cuenca, ahora que en Cali se pudo atender la emergencia suscitada por la pandemia del covid-19 y el estallido social durante el Paro Nacional.
