120 familias transformarán su calidad de vida e iniciarán un futuro libre de riesgo por inundación, gracias a la segunda entrega de apartamentos en la Ciudadela Recreativa El Pondaje y Charco Azul.
Este es un esfuerzo enorme, que desde el Gobierno Nacional en cabeza del Fondo Adaptación, sigue posibilitando el reasentamiento de miles de familias; y bajo la Administración del alcalde Jorge Iván Ospina, permite el desarrollo de un Plan Jarillón más cercano a los territorios y las comunidades, lo que consolida a la fecha, una intervención de 5308 hogares en todas las fases.
3114 están reasentados con viviendas de interés prioritario en diferentes proyectos habitacionales, 41 han logrado adquirir viviendas usadas acordes a sus necesidades, gracias a la compensación económica a título de subsidio; 712 hogares han recibido subsidio por relocalización temporal, 132 han sido compensados por vulnerabilidad, a 64 se les ha comprado su vivienda, 95 predios han sido restituidos, y 880 han mitigado su riesgo; lo que redondea una cifra que sigue creciendo gracias a la articulación de toda la institucionalidad.
Y es que tener una vivienda digna es una prioridad para esta Administración Distrital, que mencionó durante el acto protocolario de entrega: “Vivir en el Jarillón, es vivir en un lugar donde podemos tener un peligro de ciudad”; por ello todos los esfuerzos se centran en consolidar además de un reasentamiento territorial, una construcción de comunidad y vecindad.
Eli Shnaider Brener, gerente del Plan Jarillón declaró: “Con las entregas de apartamentos en Torres de Alamadina, y ahora aquí en Ciudadela Recreativa El Pondaje y Charco Azul, le estamos cumpliendo a quienes confiaron en el proyecto y están apostándole a salvaguardar nuestra ciudad, a ellos gracias”.
Este año, el Plan Jarillón tiene proyectado entregar 800 viviendas a sus beneficiarios, y lograr mejorar su calidad de vida; como la de el señor Senen Escobar, mecánico de profesión que recibió su apartamento y mencionó: “Yo vivía en el asentamiento “El Jazmín”, en las lagunas, en una situación de miseria, y ver esta casa, es un sueño que no puedo describir con palabras”; postura similar a la de doña Maria Orfelina Cuero, quien fue reasentada del asentamiento “Nueva Florida” y relata mientras recorre entusiasmada, su nuevo apartamento: “ Después de tantas lágrimas, tengo estas llaves en las manos, pero hoy en día ya me voy a evitar pagar arriendo y voy a vivir en mi casa propia”.
Como estas, son muchas historias de esfuerzo y superación que se materializan de la mano de una Administración que cree en una vida mejor para todos.